El nombre de esta comarca meridional catalana procede de la prerrogativa del Prior de la Cartuja de Scala Dei sobre sus pueblos desde el siglo XII. De hecho, tras explorarla brevemente nos damos cuenta de que en muchos aspectos ha mantenido fuertes vínculos con el pasado, manteniéndose rústica y agreste. Lo que sí ha cambiado mucho es su lugar en el paisaje vitivinícola mundial, dado que la actual denominación tiene un prestigio dorado que muy pocas regiones del mundo han conseguido en tan poco tiempo.

Eran vinos muy contundentes, nos decían de pequeños en casa.. Se vendían a granel, a un precio muy económico y su descubrimiento ha hecho que actualmente se coticen ciertas botellas a unos precios inalcanzables para la mayoría de los bolsillos. Muchos actores y cantantes de éxito de todo el mundo han abierto bodegas aquí, y quizás debido también a que grandes viticultores de la Rioja se han introducido en la zona para experimentar con estos vinos; hoy en día, se han constituido en un valor seguro. Observaremos estos pueblos colgados en las colinas de estos terrenos de piedra licorella y los tonos más oscuros de los tintos del priorato.. Sentiremos la madera de los pajares en la alborada del frescor matinal y el bouquet particular que dan la garnacha y la cariñena.. Cataremos la gastronomía única de la zona (como la “truita amb suc”) y el retro-gusto de estos vinos únicos, que han hecho merecer la única Denominación de Origen Calificada catalana. Chin chin!!